Como su nombre bien indica, la Selva Negra, región situada al suroeste de Alemania, comprende una gran densidad forestal, especialmente abetos altos y espigados. Paisajes montañosos, valles verdes y bucólicos, lagos con balnearios, altas cascadas y pueblos de tradición relojera caracterizan a uno de los núcleos turísticos más antiguos del continente. Conviene empezar el recorrido por Friburgo de Brisgovia, capital de la región. Su universidad Albert-Ludwig, fundada en 1456, proyectó culturalmente a la ciudad, e incluso hoy en día se respira un intenso ambiente universitario. Pero el símbolo de la ciudad es la catedral, una espléndida iglesia de piedra arenisca rojiza que se empezó a construir hacia 1200 y no se finalizó hasta el siglo XVI. Su elegante torre de 116 metros de altura fue calificada por el historiador de arte Jacob Burckhardt como «la más hermosa de la cristiandad». Otro de los edificios más llamativos de la ciudad es la Casa de la Ballena, donde residió el humanista y filósofo Erasmo de Rotterdam entre 1529 y 1531. En los alrededores de Friburgo se encuentra el balneario del lago Titisee, que recibió su nombre del emperador Tito y que está situado en la orilla nordeste del lago más grande y popular de la Selva Negra. Desde la ciudad de Hinterzarten se puede programar una ascensión al pico más alto de la región, el Feldberg, de 1.493 metros de altitud. Otra parada obligatoria hay que realizarla en la localidad de Staufen, en cuy posada Zum Löwen fue hallado muerto una mañana de 1536 el alquimista Johannes Faust, más conocido como Fausto, que alimentó una leyenda que influyó a uno de los más grandes escritores alemanes, Johann Wolfgang Goethe (1749-1832). De vuelta a un paraje natural, las cascadas de Triberg, las mayores de Alemania con sus 163 metros de altura, forman un espectáculo inolvidable.

A tener en cuenta
La mejor época para visitar la Selva Negra es el verano, cuando el clima es templado, con una temperatura media de 22 ºC. El idioma oficial es el alemán, pero en establecimientos turísticos se suele hablar inglés. La Schwarzwald Card es una tarjeta turística que ofrece precios ventajosos en museos, balnearios, teleféricos y cruceros. Vale para tres días y se vende en oficinas de turismo (www.schwarzwald-tourismus.info).

Cómo llegar
Desde España, hay compañías regulares y de bajo coste que vuelan al EuroAirport de Friburgo (www.euroairport.com), a 50 minutos por carretera de esta ciudad. Si se inicia la ruta desde el norte, el aeropuerto Baden Airpark (a 15 km de Baden-Baden) es el mejor acceso.

Cómo desplazarse
Alquilar un coche es la mejor opción para recorrer la Selva Negra. La A5 –autopista paralela al valle del Rin– y la A81 permiten visitar los enclaves de la ruta. Los autobuses de línea y los servicios de trenes enlazan las localidades de la región. Entre Gutach y Offenburg, funciona un atractivo tren turístico con un recorrido de 150 km. Más información: www.bahn.de.

Alojamiento
En la Selva Negra destaca la oferta de pequeños hoteles con encanto, situados tanto en ciudades como en pueblos. Asimismo hay gran diversidad de casas rurales, apartamentos y cámpings. La oferta más lujosa la tiene la ciudad de Baden-Baden. Consultas y reservas en: www.schwarzwaldserver.de/.

Visitas principales
Friburgo. Inicio de una ruta por la Selva Negra, esta ciudad conserva una monumental catedral o Münster (siglo XIII). Como vestigio de la muralla medieval, queda la Schwabentor o Puerta Suaba y la torre de San Martín, en la avenida principal, la Kaiser Joseph. En sus alrededores, hay una zona de viñas y prados.
Lago Titisee. El entorno de este lago es un gran centro de veraneo para los alemanes y para los visitantes del resto de Europa. En la ciudad de Titisee se halla uno de los balnearios más antiguos de la Selva Negra. Hay varias empresas que alquilan windsurfs y barcos de vela. Varios senderos recorren los alrededores.
Monasterio de St. Trudpert. Este convento benedictino fundado en el año 800, es uno de los atractivos culturales de la región al sur de Friburgo. Debe su nombre a un monje irlandés que fundó aquí una ermita en el año 640.
Cascada Triberg. Situada al este de Friburgo, la ciudad de Triberg se vanagloria de ser la capital de los relojes de cuco. Cerca se encuentran las cataratas más altas de Alemania, con 163 metros. Son siete saltos de agua que pueden admirarse siguiendo un sendero que asciende desde la base en una excursión de sólo veinte o treinta minutos de camino.
Hexenloch. En esta localidad próxima a Furtwangen hay una casa con molino de agua que se ha reconvertido en museo para mostrar un taller artesanal y familiar de relojes de cuco del siglo XVIII.
Gutach. A poca distancia de Alpirsbach, el pueblo de Gutach alberga el Schwarzwald Freilicht o Museo al Aire Libre de la Selva Negra. Aquí se conservan granjas tradicionales originarias de varios puntos de la región que se desmontaron y trasladaron pieza a pieza. Hay una panadería, un aserradero, una capilla y un pueblo campesino de 1570.
Alpirsbach. El principal atractivo de esta población del valle de Kinzig es el monasterio de St. Benedict, un convento de estilo románico del siglo XI. Se organizan visitas guiadas todos los días.
Oberkirch. Esta localidad del valle de Renchal, al sur de la ciudad de Baden-Baden, conserva la arquitectura tradicional de la Selva Negra, con casas de fachadas entramadas a la orilla del río Muhlbach.
Baden-Baden. La gran ciudad de la Selva Negra norte ofrece numerosos atractivos al visitante: el centro cultural Kurhaus, el palacio Neues Schloss, las ruinas de los baños romanos y el balneario Friedrichsbad.

Friburgo
El centro de la ciudad se localiza en torno a la Catedral, una obra maestra de la arquitectura gótica que se empezó a construir en el siglo XIII y se finalizó en el XVI. A su alrededor se despliega el casco antiguo, con calles peatonales y monumentos como el Antiguo Ayuntamiento, de estilo neorromántico, y la Casa de la Ballena, donde vivió el filósofo Erasmo de Rotterdam entre 1529 y 1531. También se conservan restos de la muralla, como las puertas de San Martín y la de Los Suabos. Friburgo cuenta con una ilustre y antigua Universidad, fundada en 1456 (www.freiburg.de).

Sur de Friburgo
El mayor atractivo monumental al sur de Friburgo es el monasterio de St. Trudpert, en la margen derecha del río Rin, fundado en el siglo IX y finalizado en estilo barroco. Al sudeste se sitúa el lago Titisee, junto al cual creció el pueblo balneario más antiguo de la región. Hoy se ha convertido en un centro vacacional en el que se organizan paseos en barca y rutas senderistas; destaca la del cañón Wutach.

Este de Friburgo
La zona que se extiende al este de Friburgo reúne diversos enclaves de gran interés, como la localidad de Donaueschingen, donde se juntan los dos cursos fluviales que dan origen al río Danubio. A poca distancia, se halla el molino de agua de Hexenloch, reconvertido en museo-taller de relojes de cuco. No muy lejos se hallan los magníficos saltos de agua de Triberg, los más altos de Alemania con 163 m. Más información en la página: www.schwarzwald-tourismus.info/.

Baden-Baden y alrededores
Unos 113 km al norte de Friburgo se localiza la mayor ciudad de la Selva Negra: Baden-Baden. Su origen se remonta a la época romana, cuando se fundaron las termas Aquae Aurelia. Además de templos góticos, la ciudad cuenta con interesantes edificios del siglo XIX, como la casa en que vivió el compositor Johannes Brahms entre 1865y 1874. Desde hace tres años, Baden-Baden alberga la sede de la prestigiosa Colección Frieder Burda de arte contemporáneo. La ciudad también es conocida por su Casino, las tiendas de lujo y los restaurantes (www.baden-baden.de).
Si se llega a Baden-Baden desde Friburgo, hay varias paradas ineludibles: el pueblo de Alpirsbach, que acoge el monasterio románico de St. Benedict y un Museo de la Cerveza; el Museo al Aire Libre de la Selva Negra, en Gutach, que reproduce un pueblo de 1570, con granjas, capilla, aserradero y panadería; y Oberkirch, una aldea que es ejemplo de la arquitectura tradicional.

Rutas temáticas
En Friburgo empieza la Ruta Panorámica, de 26 km, hasta Hinterzarten. Esta localidad atrae a montañeros que quieren ascender al pico más alto de la Selva Negra: el Feldberg (1.493 m). Desde Baden-Baden se puede seguir otra carretera panorámica, la Schwarzwaldhochstrase, hasta Freudenstadt.
La Ruta del Vino visita pueblos y bodegas cercanos a Friburgo y Baden-Baden, donde se elaboran los famosos vinos de la región.
La Ruta de los Relojes pasa por los centros tradicionales de fabricación de relojes de cuco: la ciudad de Villingen-Schwenningen, que cuenta con una treintena de talleres; Furtwanden, con el Museo de la Relojería; o Schonach, que presume de tener el reloj de cuco más grande del mundo.

Balnearios
Desde tiempos de los romanos, la Selva Negra ha estado vinculada a sus aguas termales. Se puede recorrer la zona visitando algunos de los establecimientos más importantes. El balneario del lagoTitisee, cerca de Friburgo; el Solemar de Donaueschingen, abierto en 1987; los Baños Glotter, cerca de Gütenbach, famosos por su emplazamiento en la cumbre del monte Luser.

0 Comments:

Post a Comment