Tesoros de Grecia

Grecia fascina por la belleza de sus paisajes y por los tesoros artísticos que aglutina de la Antigüedad. Ubicado al sureste del continente europeo, el país, que ocupa 131.957 km2, está formado, además de por su territorio en tierra firme, por 1.400 islas –sólo 169 habitadas–, distribuidas, de oeste a este, en el mar Jónico, el Mediterráneo y el Egeo. De los doce millones de habitantes del país, tres millones viven en Atenas, la capital

Cómo llegar
Olympic Airways (Tel. 915 419 945) ofrece vuelos desde Madrid y desde Barcelona hasta Atenas. Por su lado, Iberia (Tel. 902 400 500) también vuela de España a Atenas. Desde la capital griega se puede viajar a otros destinos del país, volando con compañías locales como Air Manos (www.samos.aegean.gr) y Aegean Airlines (www.aegeanair.com).

A tener en cuenta
Para viajar a Grecia se precisa el documento nacional de identidad. La moneda griega es el dracma; 1 euro equivale a 340 dracmas. La mejor época para visitar Grecia es en primavera y en otoño: el clima es más suave y la afluencia de visitantes menor que en verano; el invierno es más lluvioso y cierran muchas infraestructuras turísticas.

Moverse por el país
Desde Atenas se puede recorrer el país con vuelos internos, en coches de alquiler –hay muchas empresas en el aeropuerto–, en tren o con la red de autocares, que es extensa. Para acceder a las islas Cícladas hay ferries que zarpan del puerto de El Pireo, a 10 km de Atenas. Para las islas Jónicas, se puede coger un barco en el puerto de Pirgo; en temporada alta conviene reservar los billetes; fuera de ella, es mejor comprobar los horarios, ya que suelen reducirse; www.gtp.gr

Principales visitas
Acrópolis. La «ciudad alta» domina la capital griega. Sus principales monumentos son el templo de Atenea Niké, el Erecteion y el Partenón, todos de la época de Pericles.
Delfos. En el gran yacimiento destaca el santuario de Apolo, centro de peregrinación gracias al oráculo, y el teatro, desde donde se tiene una vista fabulosa del olivar hasta el golfo de Corinto.
Peloponeso. Esta península montañosa y de bonitas playas alberga algunos de los tesoros griegos más llamativos, como Olimpia, Mistra y Epidauro.
Islas Jónicas. Corfú, Léucade, Cefalonia y Zante son las más grandes y las que ofrecen más variedad de paisajes e infraestructuras. Pero también es un placer recorrer a pie la isla de Paxos y comer pan aliñado sólo con aceite local, el mejor de las Jónicas.
Meteora. Impresionante paisaje de pitones rocosos donde se asientan varios monasterios medievales.
Islas Cícladas. Desde el monte Kintos, en Delos, hay una bella vista de las islas. Santorini es de las más bonitas y turísticas. En el norte de la isla está Ía, unida al puerto de Arméni por un paseo de 200 escalones.
Dodecaneso. Entre estas islas cercanas a Turquía destacan Rodas, antigua sede de los caballeros de San Juan, Cos, Patmos y Cárpatos.
Creta. La mejor vista de Cnosos y de las montañas se obtiene desde la colina Kephale, a 5 km de Heraclion.

Visitar la acrópolis de Atenas
En las oficinas de información situadas en la entrada de la Acrópolis se puede contratar una visita con guía. El recinto se recorre a pie, siguiendo la Via Panatenaica. Lo mejor es acudir temprano por la mañana o al atardecer, para admirar las tonalidades que adquieren las piedras con la luz del sol y para evitar las colas; información en www.athensguide.com. Para completar esta visita se puede acudir al Museo Arqueológico Nacional –en la calle Oktovriuo, 28–; es el más antiguo de Grecia (1891) y reúne vestigios del mundo helénico; www.culture.gr

Visitar las ruinas de Delfos y Olimpia
Desde Atenas parten autocares y trenes a estos destinos, cuyas oficinas de turismo organizan visitas con guía. Las ruinas de Delfos, declaradas Patrimonio de la Humanidad, se hallan frente al golfo de Corinto y a la sombra del monte Parnaso –de 2.457 m–. La estación de autobús del pueblo, situado a 1,5 km del yacimiento, funciona como centro de visitantes, informando sobre su visita. Algo parecido sucede en Olimpia, en la península del Peloponeso, a donde se llega en tren y en autocar hasta Pirgo, el pueblo más cercano. El recinto, también Patrimonio de la Humanidad, se visita por libre, siguiendo caminos señalizados.

Visitar las iglesias de Meteora
En la región de Tesalia está Meteora, otro lugar Patrimonio de la Humanidad. Se accede desde los pueblos de Loánina y Kalambaka. Desde esta última población, una forma original de explorar la zona es a pie, por las antiguas sendas de los ermitaños (www.trekking.gr). Hay que pagar entrada de acceso a los cenobios y respetar las normas, que prohíben llevar las rodillas y los hombros descubiertos.

Recorrer las islas
El atractivo de las islas griegas es la unión entre un paisaje bello, pueblos de casas encaladas y valiosos recintos arqueológicos. En la mayoría de islas proponen actividades en contacto con el mar, como paseos en barca o buceo. En el archipiélago de las Jónicas destaca Corfú, la mayor y más frondosa isla del grupo. En las Cícladas sobresale Delos y su oráculo; no se puede dormir en la isla por lo que es importante saber el horario de los barcos para el regreso. Por su lado, Santorini, además de ambiente, tiene un rico Museo Arqueológico. A Creta, la mayor isla de Grecia, lo más cómodo es llegar en avión hasta Heraklión, su capital. Vale la pena descubrir la costa sur, más solitaria, aunque también con infraestructuras escasas que propician paseos en moto, en bici o en autobuses rurales.

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