Sólo pisar Denpasar, la capital de Bali, el visitante es partícipe de la actividad bulliciosa que se respira en la ciudad. Sin embargo, los hoteles de grandes cadenas que proliferan por todo el país distan de la auténtica cara de Bali: una organización casi medieval, que parece vivir en perpetuo estado de felicidad. De ahí que se conozca a Bali con el sobrenombre de “La sonrisa del Índico”. Se trata de un país seguro para el turista en el que se puede conseguir alojamiento y comida con unos escasos diez euros diarios. Partiendo de Denpasar con un coche de alquiler se pueden alcanzar fácilmente los volcanes en el centro del país, los bellos templos, los pueblos de artesanos de la escultura y las playas más concurridas de Indonesia. A pocos kilómetros de Bali se encuentra el templo de Tanath Lot, erigido sobre una gran roca y orientado hacia el sol poniente. Al norte, otro santuario, el pura Taman Ayun, es uno de los más hermosos de Bali. Está rodeado por un foso de agua en el que florecen los lotos y en su interior se agrupan diez merus (torres escalonadas) de hasta once alturas, dedicadas al número de montes en que residen los dioses.
En el Bukit Sari, en el bosque de Sanegh, los monos circulan tranquilamente ya que son considerados sagrados. Esta libertad requiere por otro lado estar atentos ya que los curiosos monos substraen todo lo que les viene en gana (gafas de sol, cámaras de fotos, etc.). Merece la pena visitar algunos de los templos hinduistas del país –especialmente Gangaa, Gunung Bataku o Ulu Danu- y desplazarse hasta el área de Begdul para contemplar el espectáculo natural que supone n las calderas volcánicas inundadas por lagos. Desde Singaraja parte una carretera que lleva a uno de los volcanes más conocidos: el Batur (1.717m), considerado sagrado además de ser uno de los más altos. Volcanes, lagos, verdes laderas y templos se encuentran en especial sintonía en las regiones –todavía- poco explotadas de Bali.
A tener en cuenta
Se precisa el pasaporte y un visado que se puede gestionar en el aeropuerto de llegada a Bali. Un euro equivale a 11,5 rupias indonesias, la moneda oficial. Hay seis horas más de diferencia con relación al horario español. La mejor época para visitar el destino es cuando finaliza la temporada estival, la más concurrida. Es la estación seca, con un clima menos húmedo y una temperatura media de 30º C.
Cómo llegar
Se tardan unas veinte horas en llegar a Bali desde España, ya que no hay vuelos directos. Las compañías que viajan a este destino desde Madrid, realizan escalas en una capital europea y en un país de Oriente Medio. El aeropuerto de llegada está 13 km al sur de la capital; se llega al centro en autobús y taxi.
Cómo desplazarse
En agencias de viajes y hoteles organizan excursiones con los desplazamientos incluidos. Otra opción es alquilar un coche; en Bali se conduce por la izquierda. También se puede contratar el servicio de un taxista para que nos acompañe durante el viaje, pactando antes la tarifa. Desde la estación de autobús de Denpasar se viaja a otros enclaves de la isla; los bemo son furgonetas pequeñas que se desplazan por la isla.
Dónde dormir
La mayor oferta se agrupa en la capital y en sitios turísticos como Kuta y Nusa Dua, situados al sur de Denpasar. En las playas se alquilan bungalows muy baratos. En el interior destaca la ciudad de Ubud. Información y reservas: www.bali-thepages.com.
Artesanía
Muchos pueblos de Bali tienen mercados de artesanía. Ubud es una ciudad llena de galerías de arte y talleres de escultores de madera. En Celuk realizan joyas de plata y oro, y en Batubulan esculturas en piedra. Sobre compras y artesanía: www.baliguide.com/shopping.html.
Principales visitas
Tanahlot. Templo construido sobre un islote en la costa sur de Bali, cerca de la capital, Denpasar. Ofrece las mejores puestas de sol de la isla.
Lago Bratan. Ocupa el fondo de un cráter volcánico cerca de la localidad de Bedugul. En un promontorio se erige el templo Ulu Danu, dedicado a la diosa del lago.
Taman Ayun. Templo del siglo XVII en las afueras de la ciudad de Mengwi, al norte de la capital. Se encuentra en la ruta que comunica las poblaciones de Ubud, Bedugul y Singaraja.
Volcán Batur. Se levanta dentro de un gran cráter con una parte ocupada por el lago Batur. Desde el pueblo de Kintamani se consigue una excelente panorámica del volcán y el lago.
Besakih. Este conjunto de 22 templos es el más sagrado de Bali. Se halla a más de mil metros de altitud, en la ladera oeste del volcán Agung.
Ulluwatu. Templo del extremo meridional de la península sur de Bali. Su mayor atractivo reside en los acantilados sobre los que está situado. Se representan danzas kecak.
Ruta hacia el norte
En Denpasar, la bulliciosa capital de Bali, vale la pena conocer el Museo de Historia de Bali y el Centro de Arte Werdi Buday. Una visita habitual desde esta ciudad es el templo de Tanah Lot, situado en la costa oeste. Ocupa un islote al que se puede llegar caminando cuando baja la marea. 20 km al norte de Denpasar y conectada por autobús, está la ciudad de Mengwi, con el templo Taman Ayun (abierto cada día).
Continuando hacia el norte por la carretera que cruza el centro de la isla se llega a Bedugul, a 50 km de la capital. Es el mejor acceso para explorar la zona montañosa de Bratan, cubierta de cafetales y lagos para navegar. Ya en la costa norte sobresale la ciudad de Singaraja, a 15 km de Bratan, con playas tranquilas.
Lo mejor del este
Muchas excursiones por el este tienen como meta el volcán Batur, el más activo de la isla. Se visita desde las ciudades de Penelokan y Kedisan, donde se inician rutas hacia la cima. Una de ellas serealiza de noche para llegar al amanecer; es preciso llevar ropa de abrigo. Se puede subir también en coche por una carretera que bordea la caldera. Este volcán preside un lago de igual nombre, en cuya orilla se erige el templo Ulu Danu. Se puede llegar en barcas. Al este de Batur está el volcán Agung, el más alto de Bali (3.142 m), situado a unos 80 km de la capital. En sus laderas se asienta el santuario de Besahik, con 22 templos. El recinto abre a diario y hay que pagar entrada. En el extremo oriental de Bali se encuentra la región de Klungkung, cubierta de bosques y bancales de arroz.
Península del sur
Al sur de la capital se halla la zona más desarrollada por el turismo. Destacan las playas de Kuta, famosas entre surfistas, y la península de Nusa Dua, con hoteles de lujo. En el extremo más meridional de la región se puede visitar el templo Ulluwatu.
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