En el 1786 Jacques Balmat y Michel Gabriel Paccard ascendieron por primera vez el pico más alto de Europa, el Mont Blanc (4.807 metros). Durante los siglos XIX y XX la valle de Chamonix —situada en la comarca francesa de la Alta Saboya— fue destino de aristócratas y burgueses, atraídos por la belleza de la montaña y los encantos de la valle. Hoy en día Chamonix se ha actualizado sin perder el encanto que antiguamente la caracterizó. La transformación más significativa, a parte de la urbanística, ha sido la organización y aumento de sus servicios así como la afluencia de sus visitantes;.son muchos los turistas que se acercan durante todo el año para visitar sus restaurantes, hoteles y tiendas: El lugar resulta idóneo como plataforma desde la que explorar las cercanías. Todo el valle es esquiable, hecho que también convierte Chamonix en un punto indispensable para los amantes del ocio invernal: excursiones con raquetas, visitas a lagos glaciares, esquí nórdico o de fondo, etc. Además, distintas telecabinas y trenes dan acceso a panorámicas envidiables: por ejemplo, desde los picos de Brévent o Flégère se puede admirar el Montblanc en toda su plenitud. La localidad de Argentière —ultimo pueblo de la valle— es perfecta para admirar el paisaje. Desde allí se accede a los glaciares de Argentière y Tour, situados por encima de la población. Una de las actividades más conocidas de la valle de Chamonix es trasladarse hasta Montets (a medio camino entre Argentière y la ciudad de Chamonix) para subirse en un telecabina que asciende hasta 4.122 metros, la cima del monte Aiguille Verte. Éste medio de transporte permite disfrutar de las mejores vistas del glaciar Mer de Glace. Sin embargo, desde Chamonix también parte otro teleférico interesante, éste otro con destino a la Aiguille de Midi (3.842 metros), en el que un restaurante permitirá contemporáneamente mediante su balcón de 360º, degustar los deliciosos quesos regionales mientras se observa la nieve caer.

A tener en cuenta
Para visitar Francia, los habitantes de la Unión Europea sólo necesitan el documento nacional de identidad. La moneda es el euro y el idioma oficial es el francés, aunque el inglés se habla frecuentemente en establecimientos y estaciones de esquí.

Cómo llegar
Varias ciudades de España tienen vuelos directos –algunos con compañías de bajo coste– hasta Ginebra (Suiza), el aeropuerto más cercano, situado a 82 km. Desde las terminales sale una línea de autobús que conecta con Chamonix (www.gare-routiere.ch). Un tren nocturno enlaza Barcelona y Girona con Ginebra (www.elipsos.com), desde donde es posible seguir a Chamonix en autobús.

Cómo moverse
Si no se viaja en coche propio o alquilado, utilizar el transporte público es una opción recomendable. El Chamonix Bus es una línea regular que comunica los pueblos del valle y lleva hasta los remontes mecánicos. Para moverse por el centro de Chamonix hay un minibús gratuito, Les Mulets, con salidas cada 10 minutos. Para desplazamientos más largos, el tren Mont Blanc Express enlaza las principales localidades. Durante la estación invernal, se puede utilizar la tarjeta Carte d’hôte, cuya compra permite el uso gratuito en el Chamonix Bus (excepto el nocturno) y en el tren, y también descuentos en establecimientos turísticos. Se vende en los hoteles (www.chamonix.com).

Dónde dormir
Chamonix cuenta con una extensa oferta en hoteles y apartamentos de diversas categorías. Lo más recomendable es consultar la oferta en la web: www.chamonix.com. Se puede reservar en internet en: http://reservation.chamonix.com.

Las visitas principales
Chamonix. Es la base para conocer el valle homónimo. Cuenta con una oficina de montaña, piscina y un Museo Alpino.
Flégère. Desde este pico se tiene una panorámica de la Aiguille du Midi y del Mont Blanc. Se accede en telecabina.
Aiguille du Midi. Un teleférico alcanza su punto más alto, donde hay un restaurante desde el que se ve el Mont Blanc y los glaciares de su alrededor. Un telecabina cruza el glaciar Géant hasta la frontera italiana.
Montenvers. Un tren cremallera parte de Chamonix y asciende hasta este lugar, en uno de los costados del Mer de Glace. Un teleférico accede hasta la gruta que cada año se excava en el glaciar.
Tren del Mont Blanc. La línea sale de Le Fayet y sube hasta Bellevue, desde donde se avista el Mont Blanc. Permite acceder a las pistas de Houches y Prarion.
Combloux. El estilo barroco de la iglesia de este pueblo es característico de la región.

Las mejores panorámicas
Los teleféricos que salen desde Chamonix son miradores privilegiados sobre los picos del macizo del Mont Blanc. El que sube a la Aiguille du Midi (3.842 m) ofrece vistas del Mont Blanc, de los glaciares Mer de Glace y Géant, y de la Aiguille Verte. Un telecabina comunica la Aiguille du Midi con la punta Helbronner, en la frontera italiana. El tren-cremallera Tramway du Montblanc sale desde Le Fayet o Saint Gervais y ofrece una vista espectacular del glaciar Bionnassay. Asimismo, el tren-cremallera de Montenvers, con salida desde Chamonix, permite acceder al glaciar Mer de Glace, donde se visitan la Gruta de Hielo y el Museo de la Fauna Alpina. Consultas de horarios de los remontes y tarifas: www.compagniedumontblanc.fr.

Estaciones de esquí
La mayoría de remontes mecánicos de Chamonix abren todo el año, lo que permite que se realicen numerosas actividades deportivas. El valle cuenta con más de 150 km de pistas de esquí alpino para todos los niveles. En Argentière y Montets hay itinerarios de esquí nórdico. También hay circuitos de esquí de montaña en la Vallée Blanche, con acceso desde la Aiguille du Midi. En la oficina de turismo informan de las escuelas de esquí y de los tipos de forfaits, según el nivel, edad, estancia o dominio esquiable (www.esf-chamonix.com).

Rutas de senderismo
Existen 17 km de rutas señalizadas, con planos disponibles en la Maison de la Montagne de Chamonix. Esta oficina centraliza la información relativa a la seguridad en la montaña y la contratación de guías (www.chamonixguides.com).

Ocio en Chamonix
Patinar, jugar a tenis o simplemente relajarse en una sauna son algunas de las actividades que proponen en la oficina de turismo local, para después de un día de esquí (http://sports.chamonix.com). Otra opción es visitar el Museo Alpino, situado en la avenida Michel Croz, para conocer más de cerca la historia del alpinismo y del esquí. Asimismo, otra opción cultural es visitar el Espace Tairraz, una sala de exposiciones, donde se realizan muestras temporales y donde se ubica el Museo del Cristal (www.chamonix.fr/animationculture/espacetairraz.html). También se puede realizar una visita guiada por la ciudad (reservas en la Oficina de Turismo de Chamonix), comprar material de montaña en la zona peatonal, comer una fondue o raclette en alguno de los restaurantes o, ya de noche, tomar una copa en una discoteca.

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